Sharrow presenta una novedosa geometría de hélice que optimiza el rendimiento y el consumo

Mar Abierto . La pala de la hélice Sharrow tiene el una doble cuchilla arraigada
Mar Abierto - El fabricante de las Sharrow anuncia una notable reducción en las

(18/10/19) Tras 7 años de múltiples pruebas en tanques de agua, cálculos de CFD y pruebas a bordo en condiciones reales, el fabricante norteamericano Sharrow Engineering afirma haber alcanzado un punto óptimo en su revolucionaria hélice. Este inusual diseño de propulsor entra pues en su fase de comercialización para la náutica, presumiendo de interesantes ventajas en su funcionamiento.

Según su fabricante, las hélices Sharrow son entre un 9% y un 15% mejores que la serie B de Wageningen, una referencia común para los fabricantes de hélices. Su rango de rendimiento óptimo es más amplio y, a una misma velocidad de giro, la hélice Sharrow anuncia un mayor empuje y menos absorción de energía del motor que una hélice convencional, lo que se traducen en mayores prestaciones y en una sensible reducción del consumo. Otros beneficios para el usuario son una reducción de vibraciones que revierte en una mayor comodidad de navegación.
El inusual diseño de la hélice estadounidense incluye unas palas de compleja geometría, que minimizan las superficies ‘inútiles’ de la hélice, evitando zonas de las palas propensas a la cavitación, turbulencias y vibraciones.

Mejora el rendimiento de la hélice
Sharrow Engineering nació en 2012. Su fundador, Greg Sharrow, trabajaba en la producción de videos con drones. Buscando evitar el ruido de las hélices, que entorpecía la calidad de su trabajo, analizó este elemento clave buscando mejorar su rendimiento. Tras más de 7 años de investigación y desarrollo, el estudio de Sharrow Enbineering ha alumbrado una singular hélice adaptable a embarcaciones profesionales y de recreo.

Un diseño helicoidal que limita las turbulencias
Los diseñadores de hélices, los especialistas en hidrodinámica e incluso los aficionados a la náutica (o a la aviación) saben desde hace tiempo que las palas de las hélices generan turbulencias, sobre todo en sus extremos y en las caras posteriores (de popa) de las palas. Esta inestabilidad está en el origen de muchas vibraciones y ruidos de estos elementos. Las turbulencias también perjudican el rendimiento del motor y pueden inducir a la cavitación, dañando la hélice a medio plazo.
Greg Sharrow abordó e investigó el problema de forma pragmática. Si las turbulencias se forman en el extremo de las palas y en sus caras de popa, rediseñemos estas superficies. Resumiendo el discurso, Sharrow diseñó una pala continua con doble arraigo en el núcleo. Cada pala se convierte así en una especie de cuchilla unida por sus extremos y generan un doble flujo de empuje en cada vuelta.

Llega la fase comercial
Sharrow Engineering tiene protegido su invento con patentes en los Estados Unidos, Europa y prácticamente en todo el mundo. Sus hélices ya están disponibles para buques mercantes y en breve empezará la comercialización para barcos de recreo. (www.sharrowengineering.com)