Maxi Yacht Rolex Cup: Reservada a los 50 veleros más excelsos

Mar Abierto Los apurados cruces en todas las mangas entre estos imponentes veler

(12/sep/22) La 32 Maxi Yacht Rolex Cup contó con medio centenar de estos barcos, reafirmando el buen estado de salud de esta clase reservada a las grandes esloras. Tras una semana de competición en la Costa Esmeralda, los campoones fueron el ‘Highland Fling XI’ en Maxi, ‘Vesper’ en Mini Maxi 1, ‘Svea’ en Clase J, ‘Shamanna’ en Supermaxi, ‘Capricorno’ en Mini Maxi 2 y ‘H20’ en Mini Maxi 3/4.

La Maxi Yacht Rolex Cup es un evento organizada desde 1980 por el Yacht Club Costa Smeralda (YCCS) y la International Maxi Association (IMA). Un paseo por los pantalanes frente a la casa club del YCCS permite hacerse una idea de la calidad de los barcos y regatistas que participan. Diseños de última hornada, armadores apasionados y tripulaciones de élite que manejan con destreza estos imponentes veleros.
Andrew McIrvine, presidente de la IMA, explicaba que: “La Maxi Yacht Rolex Cup, el evento más importante del año para los maxis y esta edición reúne una flota casi de récord. Los armadores, apoyados por un elenco de regatistas, tácticos y navegantes de primer nivel, vienen por varias razones: una excelente gestión de la regata, pruebas reñidas en complejos recorridos a menudo entre canales estrechos, viento fiable y, no lo olvidemos, por la calidad y el ambiente del YCCS. Ganar este evento es el galardón más codiciado".
La flota a 50 veleros con esloras entre los 18 m. (60 pies) y los 43,5 m. (143 pies), y con antigüedades entre los 89 años del Clase J Velsheda y los pocos meses del reciente ‘FlyingNikka’. Estos dos veleros, antagónicos en prácticamente todos los aspectos, comparten la filosofía con la que fueron creados: ser el más rápido y vanguardista de su época.
Cuando fue botado en 1933, el ‘Velsheda’ representaba el diseño más avanzado en jarcia, velas, acastillaje, drizas y cabos. Su palo estaba hecho con placas de aluminio moldeadas y remachadas. Las velas se fabricaron con lo más reciente en hilos de poliéster y las escotas se manejaban con winches, para alivio de las tripulaciones. A lo largo de las décadas, el Velsheda incorporó varias actualizaciones y remodelaciones para actualizarse. Ahora es más confortable, pero rinde al máximo de su potencial. Habitual de los circuitos de regatas desde los años 90, Velsheda ganó en Porto Cervo en tres ocasiones: 2009, 2019 y 2021.
Este año la gloria en Clase J fue para el Svea, que dominó la regata de principio a fin para lograr el título tras 6 mangas, por delante del ‘Ranger’ y el ‘Velsheda’. Bouwe Bekking, ganador con el Nilaya en 2011, 2012 y 2013, y con el J 'Lionheart' en 2014, contribuyó a la victoria del Svea. El holandés explicaba el atractivo de competir en un Clase J: “Es el barco más majestuoso en el que se puede regatear. Es un reto enorme llevar un J por el recorrido y es precisa una tripulación de 35 personas entrenadas. Hay que manejar una enorme superficie vélica y tangones enormes en los pasos por boya. Cada tripulante tiene un trabajo y un pequeño error se refleja en el rendimiento general. Es fantástico que haya armadores compitiendo con los Clase J. El mundo de la vela les debe un enorme agradecimiento”.
En el otro extremo, el Flying Nikka es uno de los veleros más vanguardistas de la actualidad. Es el primer Maxi con foil al estilo de los AC75 de la America’s Cup. Hacer realidad este concepto precisó los últimos avances en aerodinámica e ingeniería. El barco fue concebido lo más ligero y fiable posible para navegar en una amplia gama de condiciones. Para la configuración y geometría de sus foils se recurrió a la investigación en simuladores, mientras que el mecanismo de articulación del ala/vela se desarrolló a medida para soportar regatas oceánicas. El barco es tan innovador que compitió en solitario, en una clase creada ad hoc.